By: Nizarindani Sopeña and Andrea Arenas
Como ingenieros de audio, tenemos que tomar en cuenta diferentes factores para poder optimizar nuestro trabajo y así enfocarnos en la parte artística cuando hablamos de una mezcla. Si partimos de este principio, hay varios factores sumamente importantes que debemos tener en cuenta antes de un show para llegar a nuestro objetivo con mayor facilidad:
El rider, el cual se deberá realizar con mucho detalle, ya que dependemos de esta información para poder contar con el equipo, así como para cubrir todas nuestras necesidades técnicas específicas como las siguientes:
El input list y lista de Backline, esto nos ayudará a que el personal local (si se requiere), tenga el conocimiento de cuántos canales y cuáles instrumentos utilizaremos durante el show. Si esta lista no es correcta, perderemos tiempo y podemos correr el riesgo de no contar con los instrumentos y/o micrófonos que están previstos a utilizar. Adicionalmente, el input list nos permite configurar las sesiones de la consola de mezcla con anticipación y coherencia de acuerdo a los requerimientos del show.
El stage plot. Como sucede con el input list, contar con un stage plot facilitará a todo el personal conocer con exactitud la posición y distribución de todos los músicos e instrumentos en el escenario, permitiendo un flujo de trabajo eficaz durante los montajes y movimientos durante el show.
Tomar en cuenta los puntos anteriores nos asegurará contar con información puntual y concisa, lo que se verá reflejado en una optimización de tiempo, trabajo y fluidez a la hora del montaje.
Usualmente, la persona encargada de FOH (Front Of House) se hace cargo de posicionar los micrófonos correctamente en los instrumentos (previamente corroborado por la persona encargada de monitores).
El o la ingeniero de monitores, en caso de llevar sistemas de monitoreo personal y no contar con personal encargado para hacer una coordinación de radiofrecuencia, deberá hacer esta coordinación de manera precisa, ya que de eso dependerá la tranquilidad de los músicos durante el show y evitará problemas técnicos que generen pérdidas de la señal de audio. En caso de utilizar monitores de piso y/o side fill, la persona encargada de monitores deberá realizar una ecualización por cada zona para evitar posibles retroalimentaciones. A su vez, en el área de FOH también deberá hacerse una ecualización y revisión del sistema de PA completo. (main PA, subwoofers, front fill, out fill, delay, etcétera).
Al término de este trabajo que ambos ingenieros realizan paralelamente, deben coincidir en hacer un line check, en el cual, con ayuda de los técnicos de escenario, revisan cada uno de los inputs en donde se verifica que llegue la señal de audio sin inducción, con una polaridad correcta y de acuerdo al input list.
A continuación se realiza el soundcheck, mismo que tiene como objetivo hacer una prueba de sonido, en el que los músicos tocan algunas canciones, mismas que normalmente tienen dinámicas que ayudan a los ingenieros a escuchar cómo responde el sonido y el sistema de amplificación dentro del recinto. Otra forma de realizar la prueba de sonido es haciendo un soundcheck virtual, que consta en reproducir multitracks previamente grabados de algún otro show y/o ensayo; esto se utiliza normalmente cuando alguno o todos los músicos no puedan presentase físicamente a la prueba de sonido, tomando en cuenta que para llevarlo a cabo se deberá contar con el equipo apropiado.
Otro factor importante al sonorizar shows en vivo es que usualmente no mezclamos en los mismos lugares; esto hace que aunque se trate del mismo grupo musical y se cuente con el mismo el mismo equipo, el show suene diferente, bien sea debido a características acústicas del recinto o a las condiciones atmosféricas del lugar. La humedad, la temperatura, el público y el viento son factores sumamente importantes que afectan directamente al sonido, por lo que se deben contemplar antes de mezclar.
Por ejemplo:
La velocidad del aire cambia cuando hay alguna variación atmosférica de humedad, viento y temperatura, de manera que debemos de tomar en cuenta el clima, así como también la altitud de donde estemos trabajando. Un show que se realiza en un recinto al aire libre será muy diferente a cuando se mezcle el mismo grupo, pero en un lugar cerrado. Esto es por la acústica del teatro, pero por otro lado, en un sitio en exteriores, nos ocasionará muchos más cambios climáticos, aunque evitará posiblemente ondas estacionarias que provocan alteraciones en el sonido. Es por esto que debemos considerar primero varios factores técnicos al hacer nuestra mezcla antes de tomar en cuenta la parte artística.
Si tomamos en cuenta todo lo anterior, deberíamos haber llegado a un punto de seguridad, el cual nos permitirá enfocarnos con mayor claridad y tranquilidad en la parte artística, que es realizar una mezcla clara, precisa y balanceada, sin perder la atención en la parte técnica.